Tratamientos


El tratamiento de los cánceres lagrimales (glándula lagrimal) puede implicar una combinación de quimioterapia, inmunoterapia y cirugía.

  • Quimioterapia

    La quimioterapia intraarterial neoadyuvante (antes de la cirugía) parece mejorar la supervivencia y disminuir la recurrencia del cáncer. Se enrosca un catéter en la ingle y hasta la arteria lagrimal, donde se inyecta la quimioterapia. Esto ayuda a prevenir los efectos secundarios sistémicos.

  • Inmunoterapia o terapia biológica

    La inmunoterapia, también denominada terapia biológica, aumenta las defensas naturales del cuerpo para combatir el tumor. Utiliza materiales producidos por el cuerpo o en un laboratorio para mejorar, dirigir o restablecer la función del sistema inmunitario. Rituximab es la inmunoterapia que más se utiliza para tratar los tumores de las glándulas lagrimales.

  • Exenteración

    Si la enfermedad está más avanzada, el cirujano extirpa el ojo y el párpado, la grasa, los nervios y los músculos que se encuentran en el área de la cavidad ocular. Se lo puede preparar para un ojo artificial personalizado (prótesis) después de la cirugía. Nuestros expertos harán que coincida con el tamaño y color del otro ojo.

Pruebas


Durante un examen ocular, el médico le hará preguntas sobre sus síntomas y puede evaluar su visión y sus movimientos oculares con un oftalmoscopio indirecto (un instrumento con una luz y una pequeña lupa).

Las pruebas de imágenes que se utilizan para diagnosticar los tumores de las glándulas lagrimales pueden incluir las siguientes:

  • Ultrasonido

    Esta prueba generalmente se realiza para determinar el tamaño, la forma y la ubicación del tumor. Sylvester tiene máquinas de ultrasonido de vanguardia y técnicos de ultrasonido dedicados y altamente capacitados. En conjunto con los expertos oculares de Bascom Palmer, ofrece resultados de diagnóstico rápidos y exactos.

  • Imágenes por resonancia magnética

    Las imágenes por resonancia magnética (magnetic resonance imaging, MRI) de la cabeza nos permiten ver el interior del ojo y otros tejidos.

  • Exploración por tomografía por emisión de positrones

    La exploración por tomografía por emisión de positrones (positron emission tomography, PET) nos ayuda a determinar si el tumor se ha propagado a otras partes del ojo o del cuerpo.

  • Exploración por TC (tomografía computarizada)

    Las radiografías toman una serie de imágenes del interior del ojo y las estructuras circundantes. Una computadora luego combina estas imágenes y proporciona imágenes tridimensionales claras del área.

  • Biopsia

    Los síntomas y las pruebas podrían indicar que usted tiene un tumor de las glándulas lagrimales, pero generalmente se necesita una biopsia para confirmar el diagnóstico. Muchas veces, un oftalmólogo realiza una biopsia para extirpar las células de la glándula lagrimal. Las células de la muestra para biopsia se envían a un laboratorio para examinarse en un microscopio y evaluar si hay signos de cáncer.